En aquellos días, los diseñadores tenían que elegir entre viejos patrones o diseños sencillos. Pero en una noticia apasionante del mundo del diseño, estos dos estilos se están fusionando y creando algo nuevo y fabuloso. Consideremos cómo esta mezcla de lo antiguo y lo moderno ha reconfigurado lo que consideramos diseño.
Mezcla de tendencias antiguas y nuevas en diseño
La tradición es lo que la gente siempre ha hecho, y la modernidad es cuando las personas intentan cosas nuevas. En diseño, patrones tan básicos como flores o formas han estado con nosotros por mucho tiempo. El diseño sencillo, sin embargo, es limpio y fácil de entender.
Equilibrio en el Mercado
Existe un equilibrio que se debe alcanzar entre los patrones tradicionales y los nuevos estilos al diseñar para que la gente compre. Eso significa una mezcla de las cosas clásicas que a la gente le gusta con ideas frescas que a las personas más jóvenes les resultan atractivas. De esta manera, los diseñadores pueden crear piezas que sean clásicas pero interesantes.
Combinando Legado y Ganancia
El primero es el legado: tradiciones y valores transmitidos por los antiguos; y el segundo es el beneficio: ganar dinero. En diseño, a menudo es difícil equilibrar el legado con el beneficio. Pero combinando ambos con elementos tradicionales y sencillos, los diseñadores pueden crear productos que muchas personas disfrutarán y estarán dispuestas a pagar más por ellos.
¿Un Conflicto o un Éxito?
La combinación entre patrones tradicionales y un diseño único puede resultar en un fracaso de diseño o en un gran éxito. Todo depende de qué tan bien se combinen los dos estilos. Al encontrar ese equilibrio entre lo antiguo y lo nuevo, los diseñadores pueden crear algo que sea atemporal y moderno al mismo tiempo: algo que muchas personas desean y por lo que están dispuestas a pagar.
El valor cambiante del diseño
Y a medida que el diseño sigue evolucionando, también cambia el valor de combinar lo antiguo con lo nuevo, lo sencillo con lo tradicional. Se busca cada vez más piezas que representen de alguna manera lo mejor de ambos mundos: patrones clásicos con una interpretación moderna. Mantenerse actualizado con estos desarrollos ha permitido a los diseñadores crear no solo artículos hermosos, sino también objetos que poseen cierto valor.